En un hermoso atardecer estábamos juntos en tú casa, cómo mira un esclavo a una Reina mis ojos te observaban, súbitamente mi mente voló como si fuera Paloma, cómo gacela qué escapa del cazador perdida en los amplios mares, fue entonces cuando quise ser marinero, marinero para recorrer los grandes océanos, guiado por tú hermoso canto oh sublime sirena.
Mi entendimiento fue oscuresido, sí, gran oscuridad cayó sobre mí, pero la luz de tu rostro me alumbró con resplandor de pasión y amor, nueva vez pude ver tus labios, sí tus labios, tus labios que son como bretones rojos, muy escasos entres los jardines, como flor de liza, mojadas por el rocío del amanecer, así es tu suculento cuerpo.
Por un instante pude mirar hacia arriba, ví el cielo, dije tanto cielo para tampoco azúl, oh, no sabía que en mi devoción había faltado hasta que se presentaron dos Ángeles, uno me sujetó con mucha fuerza, el otro con voz de de mando me advirtió qué había cometido dos delitos, sin dudar respondí, díme? Él volvió hablar diciendo, no puedes compararla con el cielo azul, yo con muchas tímides pude responder, si usted no quiere que la compare, busqué algo más bello, con voz de estruendo replicó, compárala con un lirio ó con un lindo Claver, no pude articular palabras algunas, pero si pude con muchas propiedad hacer un gesto de inconformidad.
El segundo angel, aquel que me tenía sujeto, habló diciendo, habla humano!, No te quedes cayado, no quiero seguir en contradicción, argumente!, pero los Lirios, ni los claveres se pueden asemejan a la belleza de mi amor!,
De igual forma trataron de persuadirme de que había pecado por semejante comparación, aunque parecían Abogados y no Ángeles, yo lleno de valentía defendí tú real hermosura, de esa manera entres peleas y discusiones paso un lapsus de tiempo y ellos no encontrando algo semejante a ti, entonces me acusaron del segundo delito "Amor sincero" jajajaja! No te defiendas eres sin dudas culpable! Tu corazón está enamorado, eres culpable, culpable! Sí lo sé respondí, Prepárate porque te condenó a vivir en un laberinto de sentimientos, del cual jamás podrá salir, hasta que pueda lograr que ella se acerque a ti y te de un beso! Si eso sucede, será libre! No tendremos nada contra tí, sal eres libres, ni las muchas aguas podrán apagar el amor sincero!
Oscar Luperón, Autor! Gracias por leer mis comentarios los lunes, sígueme en la colega.net.do.
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